Sólo quien lleva a Dios en su corazón, puede ser instrumento de paz para los demás. El nuevo obispo de S.Sebastián, lleva la paz de Dios –el verdadero autor de la paz- en su persona. Su política será la del Evangelio y la del Padre nuestro. Ha sido recibido como Cristo, el domingo de Ramos, con el aplauso y el Hosanna del pueblo. No faltarán ni la soledad, incomprensión, traición, condena y cruz del Jueves y Viernes Santos, como a Jesús. Lo tiene asumido y seguirá adelante, con la fuerza de lo alto. Parafraseando al profeta Isaías podrá repetir con el Maestro:”El Espíritu del Señor está sobre mí, porque me ha ungido. Me ha enviado para dar la buena noticia a los que sufren, para vendar los corazones desgarrados, para proclamar la amnistía a los cautivos, y a los prisioneros la libertad, para proclamar el año de gracia del Señor”(Is 61,1-2ª).Regalo de Dios.