EVANGELIO

Proclamad el Evangelio a toda la creación
Lectura del santo Evangelio según san Marcos 16, 15-20

En aquel tiempo, se apareció Jesús a los once y les dijo:
«ld al mundo entero y proclamad el Evangelio a toda la creación.
El que crea y sea bautizado se salvará; el que no crea será condenado.
A los que crean, les acompañarán estos signos: echarán demonios en mi nombre, hablarán lenguas nuevas, cogerán serpientes en sus manos y, si beben un veneno mortal, no les hará daño. Impondrán las manos a los enfermos, y quedarán sanos».
Después de hablarles, el Señor Jesús fue llevado al cielo y se sentó a la derecha de Dios.
Ellos se fueron a predicar por todas partes, y el Señor cooperaba confirmando la palabra con las señales que los acompañaban.

Palabra del Señor.

El verdadero credo.

Analizamos los signos de los que creen:
- Echarán demonios: Apaciguarán, transmitirán paz, animarán a vivir el Evangelio, animarán a la reconciliación.
- Hablarán lenguas nuevas: Hablarán con la lógica de Dios, donde se pide perdón por aquello de lo que no se es responsable y se perdona por lo que no nos piden perdón, como hizo Cristo en la Pasión; donde justicia = misericordia y no un montón de circunstancias que se sopesan; donde se anima a vivir la humillación porque el que se humilla es ensalzado; donde no pretendo ser grande sino estar cerca del que es Infinito, etc.
- Beberán veneno mortal y no les hará daño: Pasarán junto a todas las tentaciones terrenales con la mirada puesta en Cristo. El deseo sexual desordenado, el deseo de riquezas, las envidias, los apegos a mi imagen… todo eso se estima basura comparado con Cristo.
- Impondrán las manos a los enfermos y quedarán sanos: Porque el Poderoso hace obras grandes por ellos, porque son suyos, están consagrados a Él.
Esto es creer. ¿Soy un esposo creyente? ¿En mi matrimonio expulso demonios en Su nombre...?

Aterrizado a la vida matrimonial:

Juan: ¿Y qué le aconsejasteis en esas situaciones tan duras que vive con su esposo?
Matrimonio custodio: Que no se defienda.
Juan: Pero eso es inadmisible. ¿Qué él haga lo que le dé la gana y se vaya de rositas?
Matrimonio custodio: No, que se vaya habiendo recibido un acto de amo.
Juan: ¿Encima? ¡Pero eso es injusto! Eso ¿Cómo va a ser?
Matrimonio custodio: Nosotros lo hemos probado entre nosotros. Sólo el amor cambia a las personas. Sólo el amor redime. El mal genera mal. Es necesario vivir esa humillación si quiere a su esposo.
(Un mes más tarde)
Juan: ¿Cómo va ese matrimonio al que ayudabais?
Matrimonio custodio: Mucho mejor. Él ya se ha dado cuenta del daño que hace y ya ha pedido perdón, hasta lo ha querido hacer públicamente.
Juan: ¡Qué grandes sois!
Matrimonio custodio: No, no, qué grande es Dios. Es Él quien toca los corazones y obra el milagro.
Juan: A mí me parecía una locura. En fin, lo tendré en cuenta…
Matrimonio custodio: Tenemos que creer en la lógica de Dios.

Madre,

Por nuestra dureza de corazón nos centramos en nosotros, en nuestras quejas, nuestros dolores… y no en amar. Nos centramos en nuestras fuerzas y no creemos, y así estamos a merced de las cosas del mundo. Pero queremos creer, Madre, queremos ser ciudadanos del cielo y que Dios gobierne nuestras vidas. Confiamos en Él y en el Evangelio. Alabado sea el Señor que nos muestra el camino del Amor Conyugal.