Me puse una vez a escribir unas cartas que ponía audazmente en las manos de Jesús, para que El nos hablara directamente al corazón. Seguí escribiendo y llegué hasta la número cincuenta. Las fui publicando en Internet, y al final salieron todas juntas en un libro. Te ofreceré esto días algunas de ellas por si te sirven para reflexionar. A mí, por lo menos, me ha ayudado el pensarlas ante el Sagrario. Aquí tienes la primera.
 
Carta de Jesús a ti

 
Mi sueño
 
Hola amigo. ¿A quien no le gusta recibir una carta dirigida precisamente a su nombre, a su dirección, a su persona? Considera que esta carta es realmente para ti. Y en ella quiero abrirte mi corazón, como tantas veces, para hacerte partícipe de mis pensamientos, de mis deseos, de mis ilusiones, de mis sueños...
 
     En una carta anterior te hablaba de los SUEÑOS DE MI MADRE. Ella es una mujer soñadora, porque siempre está pensando en el amor a Dios y a los hombres, hijos también de Ella, que quiere traerlos de la mano a Nuestro encuentro. ¡No sabes lo que Yo amo a mi Madre María! ¡Y lo que mi Madre María me ama a Mí, y a ti, y a todos los hombres, buenos y malos! Por eso sueña con veros cerca de Dios, para que no os perdáis la espléndida felicidad que proporciona la vida sobrenatural. Es una maravilla.
 
     Pero Yo también sueño, ¡cómo no! En estos días próximos a la Navidad sueño ilusionado con la oportunidad que muchos me darán de celebrar Mi Nacimiento. Sí, se que me dejarán entrar en numerosos hogares, aunque sea en forma de figura sencilla hecha de escayola o de barro, o de cualquier material, no importa. Pero al menos en imagen me tendrán presente, y seré como el “juguete” de la casa, de los niños sobre todo, y de todos aquellos que con buena fe quieren actualizar aquellos días inolvidables de mi entrada en la tierra como hombre, como niño pequeño. Es verdad que el lugar donde nací no era muy cómodo, pero me encontraba a gusto en los brazos de Mi Madre María, con José sonriéndome para hacerme el regalo de la alegría. La verdad es que no necesitaba más. Yo lo tenía todo en el Cielo. No viene a la tierra buscando lujos, sino a buscar la pobreza y la sencillez para salvar al hombre del materialismo, de la opulencia, del egoísmo, de la ambición, del afán de tener y dominar... Eso es lo que arruina al ser humano y destroza su dignidad. Y este peligro está siempre presente, por eso la Obra de la Salvación debe ser continua, pues continua es también la obra de la perdición.
 
     Yo sueño que la Navidad sea hoy, en este año, lo mismo que fue hace dos mil años: UN ENCUENTRO MIO CON TODOS VOSOTROS, CONTIGO, EN LA SENCILLEZ DE MI NACIMIENTO EN EL CORAZÓN DE CADA UNO. Sí, quiero que empieces a montar el BELEN INTERIOR, porque Yo lo que quiero es NACER de verdad en cada uno. No quiero quedarme convertido para siempre en una figura de barro que arranca sonrisas dulzonas durante unos días y después se arrincona. YO NO SOY UNA FIGURITA DE BELEN, SOY UNA REALIDAD VIVA, PRESENTE EN TU VIDA, CERCA, MUY CERCA DE TI, PERO QUE QUIERO ESTAR DENTRO DE TI. Ya sabes que Yo estoy en la Eucaristía. Pero, ¡¡de verdad!! La EUCARISTIA NO ES UN SIMPLE RECUERDO, NO ES UN SIMBOLO. SOY YO, ES MI CUERPO, MI ALMA, MI DEVINIDAD, BAJO EL SIGNO VISIBLE DE UN TROCITO SENCILLO DE PAN. En Belén era un Niño, en el Eucaristía SOY PAN. ¿Para qué? Precisamente para eso, para que me puedas comer y YO PUEDA NACER DENTRO DE TI.
 
 
     Mi Padre Dios, y vuestro Padre así lo quiere. Este es NUESTRO PLAN. ¡Por favor, amigo, no consientas que nos estropeen la Navidad, que nos echen a perder nuestro encuentro de PAZ! Si tú haces lo posible para amar con Gracia, Yo podré estar con vosotros, y entonces cantaremos juntos en esa NOCHE DE PAZ, en esa NOCHE DE AMOR Y DE GOZO.
 
          Hasta pronto. Tu amigo
 
                                                        Jesús

"Cartas de Jesús a ti"
Juan García Inza
juan.garciainza@gmail.com