MÁRTIRES DE SABADELL
Once  Religiosos Claretianos formaban la Comunidad de Sabadell. Atendían una Iglesia en el centro de la población: un centro de espiritualidad para la población industrial.
   El 20 de julio, todos se dispersaron y se refugiaron en persona amigas. Antes, se congregaron en la Iglesia para celebrar la Eucaristía. Depositaron la llave de la casa a los pies del Corazón de María. El día 20 de julio ardía la Iglesia. Solo quedó la estructura. La despedida no fue definitiva. La mayoría de sellos se reuniría de nuevo en la cárcel.
   La historia martirial del P. José Reixach es impresionante. El mismo día 20 al anochecer, sintió nostalgia de su casa religiosa y volvió al nido. A media noche, las turbas invadieron el edificio. Él les hizo de guía. Al llegar a la Iglesia ve todas las imágines preparada para la hoguera; comienza la quema inmediatamente. A él no le detuvieron. Vuelve a la casa de acogida.