Creo que en Occidente​ estamos confundiendo el "que haya paz" con el "a mi que me dejen en paz". Queremos que haya paz, pero no nos hacemos cargo de tantos hombres y mujeres que viven en situación de exclusión ​y explotación, que piden asilo y se les niega, que vienen de países con regímenes totalitarios que les fuerzan a abandonar el país si quieren vivir en libertad. Si seguimos mirando a nuestro lado, seguirán viniendo a nuestros países, y no todo en son de paz. Habrá paz cuando nos reconozcamos y tratemos como hermanos, cuando luchemos juntos por el fin del hambre, de la exclusión, del totalitarismo, y del terrorismo, cuando dejemos de mirar a otro lado y entendamos que en un mundo globalizado ya no hay ningún problema que no tenga una relación directa conmigo. Entonces tendremos paz.