Hace mucho que no escribo aquí. Si digo que estoy muy ocupado parece un tópico o una excusa. Un tópico puede, pero una excusa no, por que no la necesito. Nadie me ha escrito ni me ha parado por la calle diciéndome que está llorando por las esquinas desde que no me lee en ReL.


Nada se sostiene sin el Poder de Dios, por eso hemos abierto una sala 24/7 (http://24-7prayer.com), para poner a toda la parroquia y a todos los amigos que quieran (o queráis) a orar dia y noche (24h) durante 7 dias durante la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos. Queremos implorar a Dios para que actúe con poder en nuestras vidas, en la parroquia, en el barrio, en nuestra ciudad, en toda la Nación y en el mundo entero. Ansiamos ver cómo Dios hace prodigios. Hemos dividido las 7 dias en 168 turnos de una hora y ya están muchísimos reservados por gente que se compromete a cubrir esa hora en oración. Os invito a los lectores a sumaros. Mirad la información en https://www.facebook.com/sadelaf también podéis inscribiros directamente en http://www.24-7prayer.com/signup/0a551a

He titulado este artículo la noche es tiempo de salvación por que los turnos que mas cuesta llenar son los de la noche y quiero animar a la gente recordando todas las maravillas que Dios ha hecho “de noche” en la Historia de la salvación, como nos recuerda un bello himno de la Liturgia de la Horas


Ahora quiero contar un poco de lo que Dios está haciendo
y de lo que esperamos que haga.
Allá por octubre comenzamos un curso de 13 semanas que se llama Libertad en Cristo unas 40 personas, de las cuales la mayoría habían hecho Alpha y habían formado grupos. Han sido 13 semanas intensísimas que acabaron ayer. 25 participantes han perseverado. Libertad en Cristo es un curso pensado para el crecimiento hacia la madurez cristiana. Situarse ante la verdad de quienes somos en Cristo es el mayor factor de crecimiento y maduración para un discípulo y este curso es una herramienta estupenda para que, partiendo de las enseñanzas bíblicas, cada cristiano se confronte con la verdad de quién es veraderamente en Cristo, y así poder construir su vida sobre la sólida roca de estas verdades. No nos damos cuenta pero nuestra vida cristiana está muchas veces fundada sobre la carne, dudas, verdades a medias que son las que el mundo nos obliga a creer o mentiras que se han alzado en nuestra mente como auténticas fortalezas inexpugnables. Todo ello a menudo obstaculiza nuestro vivir en la libertad que Cristo nos ganó (Gal 5,1)
 

Valga como ejemplo el descubrimiento que ha hecho un participante: “he visto que tenía la creencia de que Dios no me cuida y por eso mi vida es desconfiada”. Otro: “Creo que no puedo agradar a Dios por que no soy perfecto”. “Siempre he tenido una imagen muy mala de mi misma, de mi físico y eso me ha impedido relacionarme normalmente con la gente”, “veo a Dios distante, severo y enfadado”, “tengo una adicción y creo que si lo dejo mi vida va ser imposible”,etc

Hemos aprendido a combatir esas mentiras y a “demoler las fortalezas” con la verdad: “Soy la sal y la luz de la tierra” (Mt 5,13), “Soy templo de Dios”(1Cor 3,16), “No pesa sobre mí ninguna condenación” (Rom 8,1) “Tengo acceso directo a Dios por el Espíritu Santo” (Ef 2,18), “En Cristo he obtenido plenitud” (Col 2,10), etc.

El siguiente paso en este itinerario de discipulado va ser un curso de oración y a continuación otro sobre la Palabra de Dios. No va a ser un curso bíblico sino un curso sobre cómo leer la Biblia. La meta es aprender la Palabra, amar la palabra, vivir la Palabra.

Todo esto quiere responder a la Visión que tenemos para nuestra parroquia: Una comunidad viva, sana y relevante que engendra creyentes, da a luz crsitianos, cría discípulos y envía apóstoles