Entre hombre y hombre no hay gran diferencia,

la superioridad consiste en aprovechar

las lecciones de la experiencia.

-Tucídides-

Anda Pedro malhumorado y abatido porque unas cuantas iniciativas suyas no han llegado a buen puerto. Su idealismo fogoso juvenil lo hunde con la misma fuerza que lo encumbra.

-Se acabó. No vuelvo a intentar nada. No me llevo más disgusto ni decepciones.

-Yo no sería tan tajante. Escucha:

 

 

-No siga, profe, me ha convencido; volveré a intentarlo cuando sea como usted.

-Gracias, hombre; me halaga tu comparación.

-No, si me refiero a que volveré a intentarlo no ahora que soy joven, sino cuando sea mayor como usted.