En estos días todo son cábalas, conversaciones, “trapicheos” para ver quién se puede hacer con un puesto de mando. No ha habido mayorías absolutas, y por eso nadie se puede llevar “el gato al agua” por su cuenta. Se necesitan unos a otros.

            Desde la plataforma socio-cultural Forum Humanitas, de la que soy Fundador y responsable de formación, quiero aportar mi opinión sobre el particular, después de haber oído el criterio personal de cada uno de los miembros de la Junta Directiva.


            ¿Qué ha ocurrido en estas elecciones? Pienso que el siguiente fenómeno: Por un lado un grupo numeroso ha reflexionado y ha llegado a la conclusión que no puede seguir apoyando sin condiciones a una opción política que les ha defraudado por la corrupción e incumplimiento de algunos de sus importantes objetivos programáticos. El Partido Popular se ha centrado en el tema económico, y lo ha hecho muy bien. Pero no solo de pan vive el hombre. Les ha faltado a sus líderes corazón, alma, para defender la dignidad del ser humano desde su concepción. Su proceder sobre la Ley del aborto, que prometieron derogar y no lo hicieron, y la flagrante corrupción,  ha llevado a miles de votantes a la abstención o a dar el voto a otras opciones políticas de más confianza. Al PP le falta ideología entusiasmante, y más presencia en el pueblo. Creo que le iría bien optar por el humanismo cristiano, pero los complejos de siempre de la derecha no se lo permiten, y muchísimos ciudadanos se han visto desamparados. Y lo han pagado en las urnas.

            El voto a opciones de izquierda radical puede venir de los grupos numerosos de votantes que se sienten defraudados por una derecha, o centro izquierda, que ha pecado mucho de corrupción. Los jóvenes han sido movilizados desde los medios, las aulas, y la ilusión por un mundo “fantástico” en el que todo vale. Desde estas opciones radicales pretenden volver, con cierta nostalgia del pasado,  a ideales que no conciben, precisamente, al hombre como un ser trascendente.

            Decía Albert Einstein: La suerte de la humanidad es, generalmente, la que ella se merece. Es posible que nos merezcamos un vapuleo para que despertemos del sopor del bienestar que tienen muchos, no viendo a otros que lo pasan peor. La avaricia ha sido unos de los pecados capitales más presente en estos años.

            Son los bandazos congénitos de la humanidad. Ya decía hace muchos años Homero: La raza de los hombres es como la de las hojas: cuando una generación florece, otra declina.

            Desde Forum Humanitas (www.forohumanitas.blogspot.com), deseamos a España que mire más hacia arriba. Que no pierda su alma quedando enredada en una concepción materialista de la vida. Que los que no piensan que lo haga, y que los que piensan miren más allá de su indignación. Que la conducta, y la cordura,  sea la propia de hombres honrados. Nuestro cáncer es el resultado de nuestra conducta (Aristóteles).

            El tema da para mucho más. Ahí están los medios llenando espacios muy generosamente. Pero nuestro objetivo no es político, sino humano. Y desde Forum Humanitas pensamos que no nos vendría mal asomarnos a la Doctrina Social de la Iglesia, ya que nos llevaríamos sorpresas muy gratas. Nosotros lo estamos haciendo, porque la Iglesia tiene mucho que enseñar por ser experta en humanidad.

Juan García Inza

Juan.garciainza@gmail.com