Hace ya casi dos meses de nuestro último artículo, mucho más tiempo del que hubiéramos deseado. Pero al fin, aquí estamos de vuelta con nuevos posts.

Un día alguien con mucha gracia nos sorprendió con esta frase: “Mira, a Dios se le pueden pedir muchas cosas… menos explicaciones”.

¡Pues claro que no se le pueden pedir explicaciones, faltaría más!... Las explicaciones ya nos las dio, y en persona. Están en el Evangelio. Y ante eso lo que nos corresponde es conocerlas bien y aplicarlas en el día a día para enfocar problemas, decisiones, tareas… y, en definitiva, todas las cosas cotidianas que nos ocurren en la vida.

Bien es verdad que para ello sería muy útil tener algo así como un enfoque “funcional” del Evangelio, que nos sea útil para cumplirlo como Dios manda… nunca mejor dicho.

Precisamente a esto es a lo que ahora nos ponemos.
En concreto:

Empezamos el próximo lunes.


Los Tres Mosqueteros