Opositó a canónigo magistral de la catedral gaditana dejando la diócesis de Jaén, donde había nacido en la ciudad de Úbeda.

Hablo de don Jerónimo Bernabeu Oset, que falleció hace un par de años en la tacita de plata, bordeando los noventa años. Su misión pastoral la ejerció como capellán castrense de una sección de la marina española en la diócesis gaditana.

Antes de su marcha a tierras gaditanas, estuvo de profesor y superior en el Seminario de Jaén, hasta que decidió presentarse a las oposiciones a canónigo en la ciudad más antigua de España.

Durante los veranos llegaba hasta Úbeda a ver a sus familiares. En una de estas etapas le pedí hacerle una entrevista para la radio. Me la concedió. Era la primera y la última que hablé con él.

Contó muchas cosas. La mayoría no deseó que las grabara. Las que salieron por las ondas fueron muy comentadas.

Como resumen de aquellas dos horas creo que era un hombre que quiso y pudo, cuando en su tierra quiso y no pudo.

Descanse en paz, don Jerónimo Bernabeu.

Tomás de la Torre Lendínez