La web cristiana CharismaNews ha informado el 6 de noviembre de 2013 que el joven cristiano Elias Lunyamila Meshack de 35 años de edad fue asesinado en Tanzania Otros dos jóvenes cristianos fueron heridos.
World Watch Monitor ha informado que asaltantes armados con machetes atacaron a varios cristianos durante un servicio de adoración cristiano en el Centro Adoración Gilgal, cerca del Lago Victoria, de cuya acción resultó muerto Elias Lunyamila y otrs dos jóvenes cristianos fueron heridos. No fueron robados por los asaltantes, cuyo objetivo fue asesinar cristianos.
Varios sacerdotes y pastores y miembros de las iglesias han sido asesinados por islamistas, mientras que otros creyentes han sufrido ataques con ácido. Las iglesias han sido bombardeadas o incendiadas y sus propiedades han sido destruidas por grupos islamistas.
El Yihad sigue avanzando y los islamistas continúan perpetrando asesinatos en nombre del Islam, Alá y el Corán. Sus correligionarios en Occidente mantienen un “exquisito” cómplice silencio. Pero no son los únicos que desvían la mirada.
¿Dónde está la solidaridad en Occidente hacia estos seres humanos que son asesinados por el “delito” de no ser musulmanes, de ser “infieles” cristianos?
¿Por qué tanto silencio?
¿Ha servido de algo el silencio, pensando que era mejor no irritar y enojar a los correligionarios de los islamistas en Occidente?
Asesinar a una persona por su religión o por su credo, sea judío, cristiano, ateo, budista, agnóstico, musulmán chiíta o sunnita, es alterar el orden social de la humanidad. Los islamistas asesinan a los musulmanes que no comparten su mismo y exacto credo, a cristianos, a judíos, budistas, hindúes, etc.
¿Asusta exigir a los musulmanes que viven en Occidente que condenen estos crímenes, crímenes contra la humanidad, perpetrados por los correligionarios de los musulmanes?
El vivir atemorizado ante la brutalidad del yihadismo, cuyas primeras y más cuantiosas víctimas son los mismos musulmanes, no producirá la moderación de los yihadistas; todo lo contrario, da alas y fuerza a los criminales yihadistas pues no se mueven bajo parámetros de la ética ni de la lógica, sino del crimen y de la barbarie.
Al terrorista no se le convence, se le vence.
Exigir a los correligionarios musulmanes que viven en Occidente que manifiesten claramente su condena, o aplauso, sobre los crímenes sobre población totalmente inocente y cuyo “crimen” es ser cristiano, permitirá clarificar cómo piensan aquellos y como enfrentar el problema.
Callar y desviar la mirada esperando que “el tiempo lo solucione todo” es la versión moderna de Blancanieves.
El judío Shaul de Tarso, el Apóstol Pablo de , siendo ciudadano romano apeló a Cesar y exigió un juicio en Roma [Hecho de los Apóstoles 25:112].
NOTAS
http://www.charismanews.com/world/41663-christian-youth-leader-murdered-by-machete-in-tanzania