Oí a Monseñor Munilla, en su espléndida explicación del Catecismo de la Iglesia Católica por Radio María, una idea que me ha parecido muy aclaratoria.
Hoy se habla mucho de información sexual pero poco de educación sexual. ¡Y no es lo mismo!

Es como darle a uno un automóvil y enseñarle los mandos, pero el que recibe el coche no sabe a dónde ir.
La educación sexual es indispensable para el buen uso del sexo.

Dios ha hecho la sexualidad para el matrimonio.

El uso del aparato genital es derecho exclusivo de casados en sus relaciones lícitas.

Así la sexualidad tiene un alto significado.
Tan alto que Dios ha elevado lo natural a sacramento.
El sacramento del matrimonio ayuda al uso correcto del sexo y al éxito de ese matrimonio.

JORGE LORING, S.I.
jorgeloring@gmail.com
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