El ayate de Juan Diego donde quedó milagrosamente estampada la figura de María de Guadalupe (y que se conserva actualmente en la basílica homónima, uno de los más grandes santuarios marianos del mundo, en la Ciudad de México) es un fenómeno que ha sido sobradamente estudiado. 
 
Al día de hoy es el único lienzo en el que Dios mismo plasmó el rostro mestizo de su madre santísima  perpetuándolo para siempre. Aprovechando el contexto de la celebración del día de la Virgen María de Guadalupe, emperatriz de América, ofrezco este interesante documental.


 

 

 

Jorge Enrique Mújica, LC