La estupidez de los aliados de Civilizaciones de José Luís R. Zapatero en Turquía llega a falsear la historia al afirmar que “Darwin era judío y odiaba su nariz grande, dientes deformes y frente prominente”, cuando era cristiano anglicano, educado en la tradición unitarista.

También, con el objetivo de desprestigiar a Albert Einstein, afirma que este era judío sucio, descuidado y que comía jabón.

 

“La parte triste es que durante ese tiempo estaba poniendo en los hornos y los convertía en jabón”, añade el libro.

 

Para descalificar a pensadores de este calibre, las autoridades islamistas gobernantes en Turquía aducen el origen religioso del autor, mintiendo en el caso de Darwin, e incorporando pseudo análisis psicológicos como auto odio físico-por parte de Darwin-  o suciedad e ingesta de jabón –por parte de Einstein-.

 

Las autoridades académicas de Turquía tendrán mucho trabajo para descalificar a los más de 187 Premios Noble judíos, más del 22 por ciento (220 por mil) de los Premios Nobel, cuando la población judía es el 1,8 por mil (no llega al dos por mil) de la población mundial, y esto sin contar con el innumerable aporte de judíos en todos los campos del saber.

 

Las ideas se combaten con ideas, no invocando los orígenes étnicos o religiosos de sus creadores.

El islamismo, cuyo aporte a la humanidad es el de los shahids, islamikazes, recurre a descalificar a sus oponentes, empleando inexistentes orígenes y falseando biografías.

 

 

NOTA

 

http://www.jpost.com/Headlines/Article.aspx?id=288557

 

http://www.jinfo.org/Nobel_Prizes.html

 

http://www.jinfo.org/