Diario El Mundo

saac García Guerrero. Arenillas de río Pisuerga, Burgos, 1947. Por la escuela de teatro que montó este sacerdote en Sevilla pasaron Paz Vega y Antonio Dechent. Estos días está atareadísimo con el belén animado que ha instalado en la iglesia de San Marcos en el centro de la capital hispalense.

P.- Usted le dio la primera oportunidad como actriz a Paz Vega.

R.- Entonces no era Paz Vega, era una chiquilla del colegio de Santa Ana. Me dijo que quería ser actriz de la escuela de teatro San José [del colegio Padres Blancos] y la incluí en uno de los grupos. La oportunidad se la di. Luego llegó la estrella del cine y la televisión.

P.- ¿Apuntaba maneras?

R.- Sí, nos dimos cuenta de que se desenvolvía estupendamente. En el cine la han clasificado más hacia lo sensual, pero es mucho más que eso. En el concurso de televisión [MasterChef] se ha visto otra dimensión de ella. Es posible que en el futuro tenga ocasiones, no sé si aquí o en Hollywood, de que aprovechen las cualidades magníficas de expresión que tiene.

P.- Tuvo que ser emocionante cuando Paz Vega, recientemente, al recoger un premio en el Festival de Cine de Sevilla, le dio las gracias en un teatro abarrotado.

R.- Curiosamente, en ese mismo teatro me dieron un homenaje hace unos años y ella, que estaba viviendo en América, se presentó en Sevilla para participar.

 

El resto de la entrevista se encuentra en el siguiente enlace:

 

https://www.elmundo.es/papel/lideres/2018/12/24/5c20f532fc6c83af1b8b4686.html