Nuevo Gran Maestre de la Orden de Malta: canadiense, abogado... y «no es vitalicio ni aristócrata»
El canadiense John Dunlap, de 66 años, ha sido elegido este miércoles Gran Maestre de la Orden de Malta. Una institución con rango de Estado que se dedica principalmente a las obras de caridad.
El abogado "frey" John Dunlap es el primero en ser elegido para el puesto sin tener linaje aristocrático. Dirigirá la Orden de Malta con honores de jefe de Estado y de cardenal. La sede de esta soberana orden está en la Villa Magistral, en la cima del monte Aventino de Roma.
Relaciones con 110 países
Este nombramiento tiene lugar tras las reformas del Papa Francisco para la Orden de Malta iniciadas en 2017. "Frey" Dunlap es por tanto el primero en ser elegido por un mandato de diez años, y no de por vida como era costumbre.
Durante los últimos nueve siglos la labor de la Orden de Malta ha sido proteger a los peregrinos en los Santos Lugares, sin embargo, el nuevo Gran Maestre, experto en Derecho migratorio, quedó deslumbrado a mitad de los años 80 por el modo en que esta institución cuidaba a enfermos de sida en el barrio de Harlem, en Nueva York.
En 2008, Dunlap se convirtió en "caballero profeso" al hacer los votos de pobreza, castidad y obediencia. Actualmente sólo hay 38 "profesos" en la Orden de Malta, sólo ellos pueden ser Gran Maestre. Desde ahora, el canadiense está a cargo de estos frailes militares y de los otros 13.500 "caballeros y damas" laicos que han entrado por invitación en la Orden.
La Orden de Malta es una entidad soberana que mantiene relaciones diplomáticas con 110 países. "Malteser International" es su rama humanitaria y cuenta con 90.000 voluntarios y 52.000 empleados. En 2022 dedicó 78,3 millones de euros a llevar ayuda humanitaria a todos los continentes.
Puedes ver aquí un vídeo sobre la historia de la Orden de Malta.
A mediodía de este miércoles, John Dunlap redactó a mano la carta más delicada de su vida. Como manda su ley, comunicó personalmente al Papa que acababa de ser elegido Gran Maestre. El cardenal Silvano Tomasi llevó personalmente la misiva a Casa Santa Marta. El Papa aceptó en pocas horas el nombramiento.