UN FRENO A LA REVOLUCIÓN DE CHÁVEZ Y MORALES
Lobo promete que Honduras tendrá un «Gobierno basado en la Doctrina Social Cristiana»
El nuevo presidente de Honduras ha dejado claro cual sería su hoja de ruta en el gobierno de la nación, señalando varias veces, durante su discurso de aceptación, que «la Doctrina Social Cristiana será el fundamento» en la acción de gobierno. Esta declaración, de cumplirse, convierte al país en el único freno a la América revolucionaria de Chávez, Castro, Morales y Correa.
Porfirio Lobo Sosa se ha convertido en el noveno presidente constitucional de la era democrática en Honduras, en una ceremonia celebrada el pasado miércoles. A partir de esta fecha y hasta 2014 pesará sobre sus hombros la responsabilidad de unir a los hondureños y recuperar un país azotado por la crisis política y económica.
La clave del éxito es el perdón
«Todos queremos paz en la nación y sé que algunos aplaudirán y otros se enojarán conmigo, pero les digo ‘‘sí, queremos paz, tenemos que perdonarnos todos’’ y es lo que la palabra de Dios nos dice; el perdón debe ser el estandarte que siempre debemos portar porque Honduras necesita paz», señaló Lobo durante su discurso de aceptación del cargo.
Una política de Doctrina Social Cristiana
«Haremos un Gobierno fundamentado en la Doctrina Social Cristiana... Así que no soy ninguna sorpresa. Cada vez que duden de mí, vayan a la doctrina. Ahí van a encontrar los principios de la doctrina social cristiana», subrayó el nuevo mandatario durante la toma de posesión.
Apoyo internacional
El encargado de negocios de la embajada, Alberto Miranda de la Peña, fue el único representante oficial de España, después de que el Gobierno decidiera que no acudiese el Príncipe de Asturias ni ningún alto cargo de Exteriores. Acudieron otras 20 delegaciones de Estados Unidos, Perú, Marruecos, Líbano, Suiza, Colombia, Italia, Belice, Taiwán, Alemania, Francia, Suiza, Italia, Suecia, Holanda…
Difícil papeleta
El nuevo mandatario encuentra un país aún sacudido por el narcotráfico y la crisis institucional del pasado junio, cuando el presidente Manuel Zelaya fue derrocado por sectores de la sociedad con la ayuda de los militares.
Aunque elegido en un proceso electoral, la legitimidad de Lobo aún es cuestionada por varios países. Uno de los principales retos del nuevo mandatario, por tanto, será convencer a Brasil y Argentina de que ya es hora de mirar hacia adelante, y lograr que Honduras sea nuevamente admitida en el seno de la Organización de Estados Americanos (OEA).
Un requisito indispensable es asegurar una salida digna para el derrocado mandatario, Manuel Zelaya. Con este fin ayer, Lobo tenía programado acompañar a Zelaya desde la Embajada de Brasil en Tegucigalpa hasta el aeropuerto internacional, entregarle un salvoconducto y asegurarse de que subiera a un avión rumbo a República Dominicana. Y creará un gabinete de integración.
Francia apoya, España, de momento, no
El Gobierno de España mantuvo su actitud distante hacia el nuevo presidente, mientras otros países como Francia, expresaron un apoyo claro al nuevo mandatario.
La clave del éxito es el perdón
«Todos queremos paz en la nación y sé que algunos aplaudirán y otros se enojarán conmigo, pero les digo ‘‘sí, queremos paz, tenemos que perdonarnos todos’’ y es lo que la palabra de Dios nos dice; el perdón debe ser el estandarte que siempre debemos portar porque Honduras necesita paz», señaló Lobo durante su discurso de aceptación del cargo.
Una política de Doctrina Social Cristiana
«Haremos un Gobierno fundamentado en la Doctrina Social Cristiana... Así que no soy ninguna sorpresa. Cada vez que duden de mí, vayan a la doctrina. Ahí van a encontrar los principios de la doctrina social cristiana», subrayó el nuevo mandatario durante la toma de posesión.
Apoyo internacional
El encargado de negocios de la embajada, Alberto Miranda de la Peña, fue el único representante oficial de España, después de que el Gobierno decidiera que no acudiese el Príncipe de Asturias ni ningún alto cargo de Exteriores. Acudieron otras 20 delegaciones de Estados Unidos, Perú, Marruecos, Líbano, Suiza, Colombia, Italia, Belice, Taiwán, Alemania, Francia, Suiza, Italia, Suecia, Holanda…
Difícil papeleta
El nuevo mandatario encuentra un país aún sacudido por el narcotráfico y la crisis institucional del pasado junio, cuando el presidente Manuel Zelaya fue derrocado por sectores de la sociedad con la ayuda de los militares.
Aunque elegido en un proceso electoral, la legitimidad de Lobo aún es cuestionada por varios países. Uno de los principales retos del nuevo mandatario, por tanto, será convencer a Brasil y Argentina de que ya es hora de mirar hacia adelante, y lograr que Honduras sea nuevamente admitida en el seno de la Organización de Estados Americanos (OEA).
Un requisito indispensable es asegurar una salida digna para el derrocado mandatario, Manuel Zelaya. Con este fin ayer, Lobo tenía programado acompañar a Zelaya desde la Embajada de Brasil en Tegucigalpa hasta el aeropuerto internacional, entregarle un salvoconducto y asegurarse de que subiera a un avión rumbo a República Dominicana. Y creará un gabinete de integración.
Francia apoya, España, de momento, no
El Gobierno de España mantuvo su actitud distante hacia el nuevo presidente, mientras otros países como Francia, expresaron un apoyo claro al nuevo mandatario.
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