Jueves, 25 de abril de 2024

Religión en Libertad

Blog

Los Santos del Papa Francisco

por Creo, Señor, aumenta mi fe

El papa Francisco ha hablado muchas veces de la santidad. El 19 de noviembre dedicó la catequesis del miércoles a este asunto, primordial en nuestra vida creyente.

   El Papa he señalado, al menos, tres aspectos que considero importantes:

 

    1º GRATUIDAD. “En primer lugar, debemos tener muy presente que la santidad no es algo que conseguimos nosotros, que obtenemos nosotros con nuestras cualidades y nuestras capacidades. La santidad es un don, es el don que nos hace el Señor Jesús, cuando nos toma consigo y nos reviste de sí mismo, nos hace como Él”.

La santidad no es final de un esfuerzo sino el principio d eu don de gracia. Una presencia trinitaria que se con concede en el bautismo y que quiere empapar todo nuestro ser. Todo es gracia.

    No gracia barata que aleja de Jesucristo so capa de misericordia. Aquí todo vale. No hay ni pecado ni infierno, etc, etc. Esta no la gracia adquirida por Jesucristo con su muerte y resurrección. Esta gracia justifica al pecador no al pecado. Y es gracia cara. Lo fue para Él y lo será para nosotros si somos verdaderos discípulos. Aceptar que somos pobres, pecadores, incapaces de salvarnos a nosotros mismos. Dejar que el Espíritu Santo nos vaya configurando conforme a la imagen del Hijo en una acción concreta según la vocación de cada uno. Esta Lumbre tendrá que quemar mucha hojarasca, esta Luz  tendrá que llegar  hasta los rincones más oscuros. Y esto puede realizarse sin una obediencia plena al Espíritu Santo como la Virgen María. Hasta participar de la Cruz de Cristo que misericordiosamente liberadora.

 

   2º PARA TODOS.  Si todos hemos recibido la misma presencia trinitaria en el bautismo, no podemos restringir el don de Dios a unos cuantos privilegiados. Es, sin duda una de las grades realidades que nos dejó el Concilio Vaticano II. “Este nos ha ayudado a  a entender mejor que todos los cristianos, en cuanto bautizados, tienen igual dignidad delante del Señor y están unidos por la misma vocación, que es la santidad”. “Se entiende, por tanto, que la santidad no es una prerrogativa solamente de algunos: la santidad es un don que es ofrecido a todos, ninguno excluido, por lo que constituye el carácter distintivo de cada cristiano”.

   “Esto nos hace comprender que, para ser santos, no es necesario por fuerza ser obispo, sacerdote o religioso… No ¡Todos estamos llamados a ser santos! Muchas veces, antes o después estamos tentados a pensar que la santidad está reservada solamente a los tienen la posibilidad de despegarse de los quehaceres diarios, para dedicarse exclusivamente a la oración. ¡Pero no es así! Alguno piensa que la santidad es cerrar los ojos, poner cara de estampita, así. No, no esa la santidad. La santidad es algo más grande, más profundo que nos da Dios”.

 

   EN LA VIDA ORDINARIA.  El Papa concreta en un párrafo todo esto co ejemplos que podemos trasladar a las circunstancias de nuestra vida.

   “Un ejemplo: Una señora va al mercado a hacer la compra y encuentra a una vecina y empiezan a hablar y después llegan los chismorreos. Y esta señora dice, no, yo no hablaré mal de nadie. Esto un paso a la santidad, esto te ayuda a ser más santo. Después en tu casa, el hijo te pide hablar un poco de sus cosas fantasiosas, . Pero tú, acomódate y escucha a tu hijo, que lo necesita, te pones cómodo, le escuchas con paciencia. Esto es un paso a la santidad. Después, termina el día, estamos todos cansados, pero la oración, hacemos oración. Es paso a la santidad. Después llega el domingo, vamos a misa a tomar la comunión, a veces, antes una confesión que nos limpie un poco. Y después la Virgen, tan buena, tan hermosa, tomo el rosario y la rezo. Esto es un paso a la santidad. Y tantos pasos a la santidad, pequeños. Después voy por la calle veo a un pobre, un necesitado, me paro y le pregunto algo. Es un paso a la santidad. Pequeñas cosas… Cada paso ala santidad nos hará personas mejores, libres del egoísmo y de la clausura  en sí mismos, y abiertos a los hermanos y a sus necesidades”.

 

 

Comentarios
5€ Tu donativo es vital para mantener Religión en Libertad
10€ Gracias a tu donativo habrá personas que podrán conocer a Dios
50€ Con tu ayuda podremos llevar esperanza a las periferias digitales
Otra cantidad Tu donativo es vital para mantener Religión en Libertad
Tu donativo es vital para mantener Religión en Libertad
Si prefieres, contacta con nosotros en el 680 30 39 15 de lunes a viernes de 9:00h a 15:30h
Síguenos en Facebook Síguenos en Twitter

¡No te pierdas las mejores historias de hoy!

Suscríbete GRATIS a nuestra newsletter diaria

REL te recomienda